Marvin Aguilar
Ibérico Manuel Saint Jean Larralde luego del golpe de
Estado en 1976 coordinó una gran cantidad de centros de detención en la
provincia de Buenos Aires; aquella dictadura pudo torturar a 100, 000 y
asesinar 10,000 personas. Todo para evitar una guerra civil.
Es celebre su discurso sobre sus tácticas para
mantener el orden: Primero mataremos a todos los subversivos, luego mataremos a
sus colaboradores, después a sus simpatizantes, enseguida a aquellos que
permanecen indiferentes y, finalmente, mataremos a los tímidos.
No hay malos
hijos sin peores padres. Las palabras de este generalito argentino demuestran porque
nacieron muchos de los movimientos guerrilleros latinoamericanos. Ellos que
alentaron fraudes electorales, matonería política de caudillos de pueblos que
imponían sus candidatos y leyes y que los cárteles narcos o pandillas hoy
imitan, nos empujaron a nuestro particular walking dead hispano.
Pensaron que matando al que protestaba, escribía,
predicaba se eliminaba la idea, no fue así. Con claridad vemos que tan solo era
cuestión de tiempo para que ex guerrilleros llegasen al poder dejando sin el
discurso del miedo a la derecha no nos volvimos como Cuba o Venezuela; quizás
ahora el islamofascismo funcione.
El gato
Schrödinger arenero
Ahora ya no se mata físicamente por las ideas, pero
hay otras formas de cocinar al disidente que pretenden no parecerse a las
antiguas pero que buscan lograr el mismo resultado.
La derecha salvadoreña no cambia, se releva: jóvenes o
nuevos viejos demuestran seguir pensando como lo que dicen sustituir cuando se
niegan al deber de reencontrarse consigo mismos, que es entregarle las
decisiones a la gente.
Centran su estrategia en atacar un derecho legítimo de
la ciudadanía que decide quitar a los de siempre por otros que nunca habían
estado.
El paso que falta ver no es acusar de mesiánicos o
nuevos ricos a los recién electos, sino con asumir las responsabilidades
políticas de la corrupción, equívocos económicos y disparidades sociales para
luego marcharse al retiro todos los involucrados de haber hecho en nombre del
peor liberalismo económico una puta de la democracia.
Meses atrás se viralizó en YouTube una ponencia basada
en la tecnología para derrotar al populismo de la guatemalteca Gloria Álvarez,
ella, al contrario como muchos oyeron no dio argumentos de como rebatir al
populismo democrático o socialismo del siglo XXI, bueno, no todos los que
necesita urgentemente el discurso de la derecha en estos momentos, pero si les
dijo que fue la elite financiera-social-religiosa la que abonó con estiércol
estéril el campo social de nuestras naciones y que la falta de fe de la
población en la derecha se debe a que ese estercolero ninguno pretende asumirlo
ahora desde su responsabilidad de clase dominante. Eso creó e impulsa los
socialismos del siglo XXI que ahora gobiernan Latinoamérica.
No, se equivocan quienes dicen que Marx inventó la
lucha de clases, él solo teorizó lo que estaba allí. Igualmente la diatriba que
Cuba y Venezuela propagan algún virus maligno en nuestros países; han sido los
años de la teoría del rebalse de Cristiani, la venta del patrimonio estatal sin
beneficios para todos de Calderón Sol y Flores, la desprotección de los
ciudadanos, la mercantilización de las relaciones personales, el autoritarismo
de Saca que impusieron como sistema bendecido por Dios lo que orilló a los
pobres a defenderse de los abusos de una elite inculta, machista, insensible,
racista, clasista, homofóbica y anti
histórica.
Corolario:
Mientras los presidentes Obama en Washington y Castro
en La Habana anunciaban el restablecimiento de relaciones diplomáticas luego de
décadas de un innecesario embargo económico contra la isla, en San Salvador un
grupo de manifestantes concentrados frente a la casa de Paco Flores enarbolaban
un cartel que decía: Francisco Flores y
Leopoldo López presos del socialismo del siglo XXI.
Así es nuestra derecha más obtusa aliñada con discretos
baños de corrupción, anunciando apariciones que solo ellos sienten, incapaces
de ver en el mundo del cual gusta educarse, vestir, viajar y vivir su
cosmopolitismo los deshielos que ante su miopía social suceden uno tras otro.
Ya que al reconocerse los dos gobiernos estaban
aceptando las dos formas de sistema que predominan en sus naciones y esto
dejaba de lado la bandera de enemigo al socialismo de los dos siglos.
La mala noticia para la ultra derecha es que siendo
una sola voz el bipartidismo estadounidense en materia de política exterior
pierdan esperanzas si piensan que un republicano revertirá esta decisión cuando
ocupe la Casa Blanca y, eso junto a la llegada de China continental al primer
puesto de potencia económica mundial en 2014 obliga a un cambio de discurso en
las derechas. Demasiado para quienes siguen viendo y celebrando un apocalipsis
diario.
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