Marvin Aguilar
Daniel envió una carta al Papa Francisco I. luego este
le llamó a su celular: te habla el padre
Jorge, le dijo. Daniel no le reconoció y le pareció que se había equivocado
de número. No le conozco, contestó.
Bueno, el Papa Francisco, respondió
el pontífice.
Daniel había intentado denunciar antes en la
Arquidiócesis de Granada una red de abusadores de menores y nadie allí le había
hecho caso. Es más la solución dada por el jerarca católico del lugar fue que: guardase silencio y abnegación ya que la Virgen María estaba tras de sus pasos.
El Papa le volvió a llamar, y le animó a poner la
denuncia en la Fiscalía. Además le pidió
perdón en nombre de la Iglesia Católica Romana por los abusos cometidos en
su humanidad por miembros del clero.
II
Lenin decía que había que tener cuidado con los
radicales ideológicos. Estos bajo la manta de ser los protectores de lo sagrado
ocultan las peores perversiones personales.
Esto es lo que aconteció por siglos y continúan padeciendo
las iglesias: radicales, fanáticos, integristas teocráticos, reaccionarios,
traficadores de influencias, lavado de dinero, narco-religiosos y asesinos que
bajo la sombra de los altares y templos aliados con políticos corruptos se
ensañan con grupos minoritarios para esconder su porquería.
¿Quiénes son
los que están detrás de los abusos en España? Un grupo católico de derecha, abierta
y obsesionadamente en contra de gais, aborto y de clara línea misógina y muy
dado a la vida de lujos.
Su editorial de Granada publicó el polémico libro de
Constanza Miriano: Cásate y sé sumisa, que
entre o tras cosas recordaba a la mujer que no es igual al hombre y que ocupar
su lugar en la sociedad es ser madre, esposa y estar bajo la dirección del
hombre. Pesar de su éxito en ventas el gobierno español pidió su retiro de los
estantes ya que potenciaba la violencia machista.
Irónico que el grupo detenido (4 de un total de 12) por abusar de menores tenían un blog: horizontes donde se dedicaban a proteger
a los menores de los desórdenes y desviaciones a los que los exponía la actual
sociedad laica.
En esa misma dirección en diciembre de 2009 monseñor
Martínez sentenció que una mujer que aborta es justo que sufra maltrato.
Igualmente sostuvo la ligereza que el preservativo en África era el causante de
la propagación del SIDA.
Corolario:
Dados los nacional católicos criollos a mirar la paja
en el ojo ajeno pero jamás la viga en propio, no es exagerado hacer
comparaciones entre aquellos y los nuestros ya que hipócritas son sus posturas
contra el aborto cuando no mueven pie para ayudar a los 3,500 niños
salvadoreños tirados en la frontera de EE.UU. pero si la lengua molestos por un
artículo de la embajadora estadunidense abogando por los derechos LGBTI.
Neo fariseos, por engañar a familias con hijos gais a
los cuales les prometen curar su anormalidad cuando nada dicen sobre los abusos
de sacerdotes en niños y niñas salvadoreñas durante años a lo largo y ancho del
territorio nacional. Mirar hacia otro lado cuando dejan que estos casos se
manejan con un secretismo so pena de ser ex comulgadas las víctimas si los
hacen públicos.
Infiero, no es que no hayan casos como el de Granada
en El Salvador lo que sucede es que se han ocultado, silenciado.
Arrogante y ostentoso Monseñor Francisco Javier Martínez arzobispo de Granada culpó a los medios
de destruir la vida de Daniel al hacer tanto revuelo por los hechos y, pensando
en ello, por eso se había negado a colaborar con la justicia y es hasta la
presión clara del Papa que suspendió a 12 involucrados en la trama de abusos de
menores. Finalmente obligado esta semana se tiró al suelo como solo se hace los
Viernes Santo, pidió perdón. Tarde.
¿Cuándo la iglesia salvadoreña pedirá perdón por los
abusos a menores aquí?
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