EL PAPEL DE LOS MEDIOS ALTERNATIVOS O COMUNITARIOS EN LA CONSOLIDACION DE LA DEMOCRACIA SALVADOREÑA. POR RODRIGO AGUILAR.

EL PAPEL DE LOS MEDIOS ALTERNATIVOS O COMUNITARIOS EN LA CONSOLIDACION DE LA DEMOCRACIA SALVADOREÑA. POR RODRIGO AGUILAR.

Desde la firma de los acuerdos de Paz, los medios de comunicación alternativos o medios comuniación comunitarios, han jugado un papel determinante en la consolidación de la democracia Salvadoreña, porque son espacios que, han asegurado a la mayoría de la población  el ejercicio, del derecho a la comunicación y  del derecho a la libre expresión.

El camino para cumplir con el compromiso de difundir la verdad, formar opinión e integrarse a las comunidades, ha estado lleno de obstáculos porque, algunos empresarios se oponen al funcionamiento de estos instrumentos democráticos han presionado a los gobiernos anteriores para que, se les niegue la concesión de frecuencias, a quienes operan medios de comunicación alternativos o medios de comunicación comunitarios.

Antes del nacimiento de la SIGET, ANTEL era el ente encargado de administrar el espectro radio eléctrico, y esta institución  dejó clara su posición, sobre el tema de la concesión de frecuencias, ya que sus representantes expusieron, que era posible otorgar varias frecuencias a las radios comunitarias, y plantearon dos propuestas, una que se asignaran un par de frecuencias con cobertura nacional a varias radios y que estas fueran fragmentadas o la otra era reducir el ancho de banda.

Esto generó un debate, en el cual intervino la Procuraduría de Derechos Humanos, recomendando al gobierno que, implementara los mecanismos técnicos necesarios y otorgara los permisos a las radios comunitarias, la respuesta del Ex presidente Alfredo Cristiani fue, ignorar esa recomendación y por el contrario endureció su postura  negándoles las frecuencias y ordenando su cierre en 1993.

A raíz de la acción del gobierno de Arena, varias radios comunitarias fueron clausuradas, y además sus equipos fueron confiscados, pero esto no logró frenar su decisión de cumplir con su compromiso social, teniendo como resultado que estas se agruparan para conformar la Asociación de Radios y Programas Participativos de El Salvador, conocida por sus siglas ARPAS, organización cuya existencia jurídica se formalizó  el 26 de febrero de 1994; la cooperación internacional dio el apoyo financiero, para que ARPAS pudiera comprar una frecuencia, que en la actualidad comparten aproximadamente 23 radios.

El signo distintivo de esta agrupación de radios comunitarias es, la promoción de, la participación ciudadana, la organización comunitaria, el desarrollo local, los derechos humanos, los valores democráticos, la equidad de género, la memoria histórica y la defensa del medioambiente.

La Asociación de Radios y Programas Participativos de El Salvador, ARPAS, está compuesta por Radio Victoria, Radio Tehuacán, Radio Tazumal, Radio Sumpul, Radio Suchitlán, Radio Stereo Sur, Radio Sensunat, Radio Segundo Montes, Radio San Pedro, Radio Milenio, Radio Mangle, Radio La Klave, Radio Juvi, Radio Juventud, Radio Izcanal, Radio Güija, Radio Guazapa, Radio Fonseca, Radio Fe y Alegría, Radio Bálsamo y Radio Acaxual, y otras radios cuyo ingreso a la Asociación se encuentra en proceso, como radio Cacahuatique, todas  funcionan a lo largo  del país utilizando la frecuencia 92.1 FM.

Para detener el avance de estos medios y programas participativos, surge en 1997 la Ley de Telecomunicaciones, en la cual los monopolios comerciales y la derecha salvadoreña, se aseguraron que esta normativa, no reconociera a los medios comunitarios y que se estableciera el método perverso de la subasta pública, como único mecanismo para la asignación de licencias para operar frecuencias de radio y televisión, otorgándolas a quien haga la mejor propuesta económica, dejando sin acceso a obtener una frecuencia a, personas naturales o jurídicas de escasos recursos económicos.

Frente a esta realidad, ARPAS y FESPAD, junto otras organizaciones presentaron un recurso de Inconstitucionalidad el 23 de agosto del 2012,  pidiendo que las disposiciones de esta Ley, que atentan contra el principio de Igualdad, contra la Libertad de expresión  y contra el orden económico Constitucional,  sean expulsadas del ordenamiento jurídico.

Infortunadamente, este recurso no ha recibido el tratamiento express, con que este tribunal ha beneficiado otros demandantes, pues todas y todos conocemos, que hay procesos que en tres horas han dictado resolución, esto pone en evidencia que, algunos funcionarios pueden aplicar la justicia de forma selectiva, ya sea agilizando o retrasando un proceso, pero esto ocurre cuando, se afectan o se defienden los intereses de algún grupo con poder político o económico.

Otra acción, que promovieron ARPAS Y FESPAD, y que ha sido respaldada por 50 organizaciones y medios de comunicación democráticos , es El Proyecto de Ley de Radiodifusión Comunitaria, cuyo estudio realiza la Asamblea Legislativa, pero que su discusión ha sido retrasada por maniobras de los partidos de derecha que se oponen al proyecto, especialmente el Partido ARENA, cuyos miembros defienden la visión mercantilista de las radios privadas, que conciben la comunicación como un negocio y no como un derecho fundamental de la mayoría de la población.

Por esa razón es necesario que, quienes creemos que, la comunicación y la libre expresión, deben ser reconocidos como un derecho fundamental, y que los medios alternativos son, instrumentos para el desarrollo integral de las comunidades, debido al aporte que realizan para la consolidación de la democracia Salvadoreña, debemos unirnos para,  Apoyar la gestiones de ARPAS, presionando para que, la Sala de Constitucional resuelva favorablemente el recurso que conocen desde hace más de un año y además para que la Asamblea Legislativa apruebe la ley de Radiodifusión Comunitaria.