El mapa político de El Salvador sin duda ha comenzado a cambiar de manera acelerada y convulsionante. Para algunos expertos en materia política salvadoreña, el cambio habría comenzado el 15 de Marzo del 2009; Para otros comenzó en 1992 cuando se firmaron los acuerdos de paz y la izquierda se convirtió en partido político; Otros ponen al gobierno de Duarte como punto de partida por ser el primero en sentarse a negociar con la izquierda revolucionaria. El que ARENA gobernara veinte años también es un punto para poner a la derecha en perspectiva y como punto de referencia al fin del militarismo.
Pero la realidad actual está mostrando que el cambio en el mapa político realmente se está delineando hoy; precisamente a principios del 2010, y en las narices de los que antes lucharon y sacrificaron sangre por un lado y recursos por otro lado.
Pareciera que la muerte suave y paulatina de las dos corrientes ideológicas tradicionales extremas; que por años han predominado en la política cuzcatleca, para bien más que para mal, es casi inminente. Irónicamente, el exterminio lo están maniobrando de manera deliberada elementos propios de poder en la cúspide: Tony Saca y Mauricio Funes. Ambos se han revelado contra sus respectivos partidos y con esto los días de la derecha y de la izquierda parecieran estar contados.
Con esperanza, emoción e ingenuidad, las viejas bases les construyeron las pistas para emprender vuelo a estos dos jóvenes. Y ya en las alturas, ambos buscaron pistas de aterrizajes de otro color y mas vulnerables a la aceptación de sus arrogantes alas. O al menos que veneren sus extravagantes plumajes. El objetivo es mantenerse a flote en terrenos más fértiles y menos idealizados. Tal como la población en general está demandando, producto del desgaste que las dos extremas han desarrollado al no ofrecer alternativas claras y convincentes a tanto problema social y económico.
Aunque acaban de florecer en política, Saca y Funes, son dos modelos de última generación que simbolizan la máxima expresión de cien años de lucha y resistencia de izquierda y derecha respectivamente. Las bases de ambas corrientes, aunque parezcan sólidas y con experiencias incuestionables, no tienen la fuerza ni la credibilidad suficiente para detener el vuelo emprendido por estos dos halcones de alas densamente extendidas con las que saben volar muy bien. Con sus vuelos por las alturas buscan desprenderse de las figuras ortodoxas para formar, entre las generaciones nuevas, figuras frescas de mejor aceptación. El espectáculo hace recordar al viejo y conocido refrán, “cría cuervos, y te sacaran los ojos”.
La derecha ha gobernado con el apoyo de militares bien pagados y soldaditos embobados casi toda la historia del país. Y a la par, la izquierda copiando ideas bohemias externas, ha lavado cerebros de campesinos aprovechando su ignorancia y necesidad que la misma derecha ha venido produciendo con políticas de exclusión social. Por un lado, la derecha explota a pobres e ignorantes para construir sus riquezas; y por otro, la izquierda utiliza a pobres e ignorantes para destruir esas riquezas o quedarse con ellas. Mientras tanto el pobre ignorante, como sándwich en medio de la disputa ideológica, construyendo y destruyendo para alimentar la ambición de ambas corrientes; ya ha perdido la esperanza y se ha lanzado al fanatismo para reclamar espacios que nunca llegaron. Como la buena mujer, a quien la mala suerte le pone solo malos maridos, por necesidad mejor decide lanzarse a la prostitución para sobrevivir.
Así se ha venido construyen la historia de un país chiquito para que nunca llegue a ser grande. Dos ideologías extremas bloqueando el desarrollo; el objetivo para sacarlo del subdesarrollo, brilla por su ausencia en el ámbito político. La ambición fue y sigue siendo llegar al poder a cualquier costo. Ambas tendencias en disputa obstaculizaron el desarrollo humano, económico y social a costa de los pobres e ignorantes que ellos mismos han venido produciendo y utilizando como carne de cañón para mamar de las tetas del estado.
Sin embargo, estos dos nuevos engendros de la lucha por el poder, han logrado sentarse en el sillón sin sudar camisetas y sin conocer la miseria. Fácilmente llegaron a lo que los vejestorios recalcitrantes de ambas tendencias han soñado y pocos han alcanzado por años y por lo que algunos han expuesto hasta sus propias vidas. Y con el favor bien hecho, ya sentados en la comodidad del tan anhelado sillón presidencial, Saca y Funes, sutilmente han desenvainado el machete (para bien más que para mal) y darle el filazo a esas ideologías retrogradas que tanto mal han hecho al país y que lo han mantenido en el subdesarrollo.
Antonio Saca con su nuevo partido GANA, le está dando un golpe bien bajo a la derecha recalcitrante para sacarlos del curso político en el que han predominado y gobernado desde los mil novecientos entonces. Y estratégicamente, este nuevo partido formado por Saca, “aparentemente” no está adoptando ninguna de las dos viejas tendencias tradicionales y mal olientes. Aunque para el arranque se han utilizado vejestorios derechistas a sabiendas que en el 2012 podrían ser lanzados al botadero para su reciclaje.
Por otra parte, Mauricio Funes con su Movimiento Ciudadanos por el Cambio, está usando caudal político de resentidos y frustrados. Y lejos de adoptar semejanzas del partido trampolín con el que llegó a la presidencia, pareciera que está formando algo paralelo a lo que Saca ya tiene formado.
Saca terminó expulsado del partido que lo llevó a la presidencia y ahora es reprochado y visto como adversario en la derecha. Funes también está ganando reproches y reclamos dentro del partido FMLN que lo llevó al poder; al grado que muchos rumoran un divorcio en plena luna de miel. Pero si vemos hacia atrás las páginas del viejo libro rojo, Funes nunca vistió camiseta roja, nunca quemó llantas frente a catedral, nunca dinamitó puentes ni postes del tendido eléctrico. Es mas, tal ves nunca haló el gatillo a un fusil; y por eso quizá nunca hubo matrimonio, y si lo hubo, fue un matrimonio de cuarenta y veinte, de esos en los que la chica al despertarse a la par de un viejo rabo verde, decide ponerle los cuernos con alguien mas joven. Y se sabe que Saca andaba merodeando por la casa bien temprano.
Los dos nuevos movimientos políticos están creando pesadillas en los recalcitrantes y viejos defensores de las dos ideologías, izquierda y derecha. Ven en ellos su exterminio político o futuros amenazantes e inciertos.
Sin embargo, las nuevas generaciones ven en estos dos nuevos movimientos, una ilusión apasionante que despierta la esperanza para sacudirse de esas dos viejas tendencias que tanto mal le han hecho a generaciones completas del pasado.
Sin duda algo nuevo se esta formando en política, dos nuevos grupos que vienen a sustituir las viejas ideas retrogradas en un país tan golpeado por políticos defensores de lo ideológico a cualquier costo, incluyendo el humano.
Hay que estar concientes que estos dos jovencitos no son los primeros ni los últimos en tratar de formar partidos políticos para revertir las tendencias extremas. Muchos han tratado en el pasado con movimientos de centro izquierda, centro derecha, solo centro y apenas llegan a engendros políticos antes de morir. La diferencia con Funes y Saca, es que son los primeros en hacerlo desde el sillón presidencial. Esto quiérase o no, es lo que mas cuenta para tener credibilidad a la hora de vendérselo a los expertos en formar bases políticas que se traducen a votos. Ya sea por que hay dinero envuelto o ambiciones a posiciones políticas, cualquier iniciativa del presidente, siempre tendrá mayor peso que cualquier otro politiquero a medio camino. Y es por eso precisamente que han fracasado tantos intentos por formar grupos en el pasado. Aparte que, los que han tratado en el pasado, no son políticos de pesos pesados, su fracaso ha sido el adherirse a las tendencias existentes y cargadas de sombras que pesan en reputación ante la sociedad.
Estos dos nuevos movimientos políticos se puede decir que la gente no los identifica ni los asocia con esas viejas tendencias ideológicas. Por su frescura política, despiertan morbo en una sociedad cansada de viejas posturas apestosas a izquierdismo o derechismo. Si las intenciones fueran buenas, se esperaría a que nos convirtamos en país de visión única para el desarrollo. Algo de lo que hemos carecido tanto por que las viejas tendencias nunca lo han permitido. Ojala que estos dos diseñadores del nuevo mapa político se mantengan paralelos, compitiendo en elecciones, pero juntos por la patria. Lamentablemente ya existe la duda en estos halcones, muchos creen que le sacarán los ojos al pueblo como cuervos criados en jaulas de media alta.
Madurez política que antes parecía impensable, debería surgir de entre los viejos escombros. Tal como sucede en países como Estados Unidos, en el que vemos a un Bush con un Clinton jugando al golf en plena campaña presidencial, seria aplaudidle ver a un Funes y a un Saca e el 2014 jugando golf en el Club Campestre, único en el mundo rodeado de casas de cartón como vista panorámica.
Elmer Palma
Miembro de Salvadoreños en el Mundo. Comité Empresarial con Responsabilidad Social.
En una cita bibliográfica, Violeta Bonilla (1926-1999) expresa sobre el significado de la figura: “Quise representar un hombre sin ataduras, sus manos sueltas expresan la libertad intangible, y los cuatro picos del fondo representan otras cuatro naciones centroamericanas”
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