Ha llegado el zenit de este día y estoy arto de ver la falacia y demagogia de los seres humanos, que se carcomen entre sí, para hartar su alma con simples banalidades y cosas sin importancia de cara a la realidad concreta. “La pobreza en nuestro Pulgarcito”
Que mejor alternativa para descargar la rabia, decepciones y frustraciones, que hacerse acompañar de una inspiradora melodía que nos motive a la reflexión.
Les comparto “Este es un nuevo día”, canción inspirada en la vida misma.
Muchos salvadoreños nos la pasamos pegándonos en el pecho por nuestro país y gritándolo a los cuatro viento, que mi país aquí, que mi país allá, defendiendo ideologías carcomidas por el tiempo negándose a ver el futuro como nación, ideales partidarios que solo benefician a sus cúpulas, enriqueciendo a los que siempre han tenido y hoy también a los nuevos que han surgido. Y de la Selecta ni se diga, que como siempre juega bien, pero pierde como siempre.
Tan ciegos y sordos somos, que medio escuchamos o leemos algo diferente a nuestro pensar y ya tenemos enemigos, somos párvulos del dialogo, comprensión y faltos de respeto al derecho ajeno de manifestarse. Al final siempre somos lo mismo, una llamarada de tusa que nos decimos llamar salvadoreños. Que para cosas importantes no tenemos oídos y carecemos de vista, porque nos hacemos los ciegos.
Hacedores y promotores del egoísmo por envidias que solemos disfrazar con la apatía y desconfianza, porque solo somos como el azadón “Todo solo para adentro y nuestro beneficio”, no miramos a nuestro alrededor o a quien carga con mayores penas que las nuestras. Somos incapaces de hacer nuestro el dolor ajeno y tender una mano amiga a quien lo necesita.
Una realidad de una inmensa mayoría y donde como todo hay excepciones. Por las que damos gracias ya que nos inspiran a dar gracias a Dios por la vida y nos motivan a ser mejores seres humanos día a día. Dignos ejemplos que emular que la misma vida nos los comparte. Y esta es la historia de una de estas salvedades.
Ayer por la mañana daba mi paseo acostumbrado por el diario por el ciber espacio y actualizarnos del acontecer, me doy cuenta que Gloria Menjivar me había invitado a ser parte de un grupo a través de la red facebook denominado ayudemos a Bryan. Gracias por habernos incluido.
Como todo buen curioso me puse en contacto con ella, solicitándole más información al respecto. Las respuestas solo me llevaron a pensar en la inmortalidad del cangrejo, las ironías de la vida, y no encontrar respuestas a mis propios cuestionamientos una vez conocí un poco mas de esta realidad.
Hechos de la vida real que quizá no sea caso único, sino el de muchos que guardan silencio y tratan de superar por sus propios medios a falta de una mano amiga ante la carencia de alternativas de quienes tienen la responsabilidad de velar por el bienestar de sus ciudadanos, pueden por su capacidad y no quieren por su egoísmo materialista
Bryan Castillo, es un infante de un año y un mes, oriundo de San Marcos, el cual nació con una deficiencia es su uretra, presenta cálculos renales, cardiopatía y desnutrición severa. Esto además de la lamentable situación precaria y económica de la familia al ser una más de los que viven en extrema pobreza en nuestro país. Que gracias al altruismo desinteresado de Gloria Menjivar quien aporta su tiempo y recursos dentro de lo que esta a su alcance ya que tambien ella misma encara su propia enfermedad.
La familia y el niño han comenzado a vislumbra una luz de esperanza al final del túnel.
El camino no ha sido fácil para que tan loable causa progrese ante la incomprensión, falta de sensibilidad y humanitarismo de quienes han tenido que tocar sus puertas. Como el siguiente caso que nos compartió y que no entendemos la absurda posición adoptada por el sistema bancario al no otorgar prerrogativas viables tratándose de una causa benéfica.
Cita textual
En días recién pasados y con motivo de la campaña que con mi amiga Isabel Cornejo hemos iniciado en favor de un pequeñín de 13 meses, llamado Bryan Castillo, y a fin de obtener donaciones en efectivo para poder comprarle las necesidades básicas del niño, decidí apersonarme a los bancos para la apertura una cuenta a nombre de niño, sin embargo mis intentos resultaron nulos, ya que me piden un mínimo de 100 dólares para abrir dicha cuenta... y yo, no los tengo, no están en mis posibilidades, ya que estoy en periodo de remisión de leucemia y aún tengo que comprar mis medicamentos, entonces no me queda ni medio centavo. Precisamente por eso, me vi obligada a cerrar la que ya antes yo tuve.
Además, para abrir la cuenta de Bryan, me piden hasta la magnífica. Comenzando por la partida de nacimiento, los documentos que demuestran la enfermedad de Bryan...mis propios documentos, un permiso autorizado por los padres y autenticado por abogado y notario... en fin...
Me apena vivir en un país con una mentalidad bancaria paupérrima. La cuenta es para ayudarle al peque, no a mi!! Me negaron la ayuda... Eso me incomodó tanto, me enojó de tal manera que opté por retirarme antes de que se me saliera el apellido y rebajara mi dignidad.
Que más sigue ahora?? Hasta que tenga la platita podré abrir una cuenta propia que solo usaré para recaudar lo de Bryan. Una amiga me dijo este mediodía que su hija hará trámites para lograr que pueda abrir la cuenta del pequeño Bryan. Ojalá se pueda...
Gracias por todo Jorge...
Saludos y un abrazo!
Un llamado para la comunidad salvadoreña en general a que unamos esfuerzos para darle UN NUEVO DIA a Bryan Castillo, afiliándose a la campaña “AYUDEMOS A BRYAN” y contribuyan con lo que este a su alcance.
http://www.facebook.com/#!/home.php?sk=group_247205368629605&ap=1
Y no dejen de visitar este álbum
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Para información contactar a Gloria Menjívar" glomenjivar@yahoo.com.mx o vía FB. Y si dentro de nuestros lectores existe alguno que labore para algún banco nacional que quiera hacer la caridad de ayudarnos abrir la cuenta, se le agradecerá.
Prensa Digital Un foro virtual, abierto al dialogo constructivo que nos permita conocer el pensar y sentir de sus miembros en torno a una temática que consideramos responde a una realidad concreta. Somos inmigrantes. Y hoy por hoy, vivimos en Long Island, NY. USA.
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