La derecha que prefiere a Obama
Marvin Aguilar
En la derecha hay personas pragmáticas, es falso
aquello de que solo trabaja y la izquierda piensa.
¿Es normal qué alguien que se dice de derecha termine
hablando izquierda? Veamos algunos casos recientes en Estados Unidos:
El gobernador del Estado de Nueva Jersey Chris Christie aliado de Romney elogió
al presidente Obama por su altura y
maravillosa gestión por la tormenta Sandy.
Ante las llamadas de atención por personas que no
comprenden porque un republicano alaba a un demócrata a días de las elecciones
el señalado contesto en Twitter: me
importa un comino la elección después de lo que ha pasado aquí. Me preocupa la
gente de Nueva Jersey.
Otro republicano ex gobernador del crucial Estado de
Florida Charlie Crist declaró que
deseaba que Obama fuera reelecto.
El ex secretario de Estado de George W. Bush el
republicano Colin Powell expreso así
su apoyo: la senda trazada por Obama es
la que debe seguir el pais, aunque falta mucho por hacer.
La acción de Powell sorprendió a propios y extraños,
el comando de campaña de los republicanos respondió diciendo que todo estaba
relacionado a que ambos eran negros.
El principal semanario de derecha y biblia económica
de los empresarios the economist pidió
el voto para la re elección de Obama aduciendo que es mejor lo malo conocido
frente a un republicano peligroso e incierto como lo es Mitt Romney.
Finalmente cabe destacar que un gran conservador y ex
republicano Michael Bloomberg que
además es el alcalde de Nueva York anunció su apoyo a Obama para el 6 de
noviembre debido a que este era un presidente comprometido con el cambio
climático y como sabemos su ciudad acaba de sufrir una inundación.
El ala republicana del Tea Party de donde procede el
candidato a vicepresidente Paul Ryan sostiene que los llamados efectos del
cambio del clima son inventos.
Las elecciones estadounidenses nos permiten poner en
evidencia como algunos miembros de la derecha asustados por sus candidatos,
conocedores que las soluciones que demandan las circunstancias no están por ese
momento en las capacidades de estos, actores que desempeñan un papel que les
viene grande, anteponen los intereses de las personas a la ideología se apartan
de su partido para dejar gobernar a la izquierda.
Cuando se observan dirigentes o líderes que están secuestrados por sus emociones, religión e
ideología más que por la realidad nacional, real politik o los Derechos Humanos
no puedes menos que distanciarte siendo consecuente con tus ideas: a favor de
las personas.
La derecha liberal en el sentido británico de la expresión que es con la cual
me identifico se diferencia de la práctica latinoamericana o estadounidense del
término.
Entendemos que no se puede ver siempre como menor de
edad al pueblo, solo la libertad los hará
libres entonces es misión divina de los políticos darles conocimiento, todo
lo que se aparte de eso es demagogia.
Leemos a los
que nos leen:
En
la columna pasada: Un apocalipsis diario
uno de los lectores de nombre “Carlos” escribía lo siguiente: otra vez me vuelvo a preguntar: ¿de
dónde sacan que Marvin es arenero? por cierto se le olvido Marvin mencionar la
guerra civil, la destrucción que tuvimos durante esta…
Luego el viernes 2
de noviembre en el programa de televisión Foro Ciudadano de TRV en San Miguel
de igual el conductor Nelson López me trasladaba la pregunta de algunos
televidentes que deseaban saber si me había “hecho” de izquierda.
Aspiramos a una
derecha decente.
La crisis social y de valores que refleja la Asamblea
Legislativa y que vive nuestro país se debe al desaparecimiento paulatino de
credibilidad entre la gente en primera instancia con los dirigentes y en
segunda con los medios de comunicación tradicionales.
ARENA propició una relación incestuosa con el poder
financiero y político, juntos le han venido diciendo a la población en
complicidad de los medios que solo cuando gobierna la derecha todo está bien, que
el sistema sin ellos es imperfecto.
Este discurso desconoce el derecho legitimo que tiene
la izquierda de existir y gobernar autorizando un boicot permanente a su
gestión que redundará en una frustración para un sector de la población que
imposibilitada de expresarse políticamente recurrirá al estallido social como
única forma de hacer valer sus aspiraciones sectoriales.
Si pienso como docente universitario, columnista y
cineasta aportar a la patria la entiendo como una entidad que reconozca su
diversidad y una derecha comprometida con valores no puede ir contra esta
máxima de paz social, una falsa si lo hace.
Desde la social media nuestro compromiso es que la
gente vaya cuando menos planteándose: ¿qué es mentira? ¿Qué no funciona para
todos? ¿Qué políticos no son capaces de solucionar los problemas más sentidos
por los ciudadanos? ¿Si habrá un sistema alternativo que venga propuesto desde
la derecha sino es que la izquierda se adelanta; pero que eso sea
intranscendente si nos hace salir de la periferia?
Esto no es rápido ni automático pero continua
sucediendo y así proseguirá, eso es lo que temen las elites que no desean
compartir el poder que formalmente se dice emana del pueblo pero que en nuestro
caso ya no es así sino que lo otorga - pervirtiendo
la democracia- el poder financiero.
Bien debe saberse que durante el proceso de cambio de
opinión pública, de patrones conservadores a democráticos, de respeto y
dignidad a la persona – no solo antes de
nacer- sino una vez nace, crece, desarrolla y envejece existirán traumas y
conflictos sociales en donde la oportuna, honesta, informada e informadora
opinión basada en la razón, lógica, ciencia y no en el mito, la superstición o
interés particular ideológico de personas o grupos ayudara a lanzarnos como
nación hacia el futuro.
Buscamos derrotar desde luego al discurso trasnochado,
pendenciero y pre moderno que circula y pulula en el medio de editorialistas
del país.
Desde esa honestidad intelectual surgen mis artículos para
que las personas comiencen a informarse distinto de cómo lo han venido haciendo
los medios convencionales. Con esa intención surgió La Página.
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