LA NOTICIA , pública y se entiende que fueron invitados a un evento al cual asistieron los medios con la finalidad de conocer las propuestas del consejo hispano del condado de Suffolk, del cual forma parte el Sr. Mata y que hicieran a la legislatura y al ejecutivo del condado, sugiriendo la disponibilidad de fondos para anunciar en los medios hispanos. Adicionalmente el anfitrión aprovecho la oportunidad para compartir la buena nueva de su candidatura a la junta de la biblioteca pública.
En cambio la nota al pie de foto publicada por NUEVA AMERICA, deja entrever que fueron convocados para escuchar la propuesta electoral del anfitrión quien los agasajo con viandas patrocinadas por una firma de abogados. El resultado de dicho evento es el consenso de los medios locales de apoyar el sueño de un hispano salvadoreño.
QUIEN DICE LA VERDAD…Solo ellos lo saben
Almuerzo y anuncio de candidatura: Varios propietarios de medios impresos de Long Island, fueron invitados a un almuerzo organizado por Giovanni Mata, el miércoles 23 de marzo en el restaurante Casa Vieja de Brentwood, donde los presentes además de disfrutar deliciosos platillos, tuvieron la oportunidad de escuchar las propuestas de Mata, quien anunció su candidatura a la Junta de la Biblioteca Pública de Brentwood, elecciones que se llevarán a cabo el 13 de abril. Mata también hizo énfasis en las recomendaciones que el Consejo Hispano del Condado de Suffolk (SCHAB), del cual hace parte, envió a la legislatura y al Ejecutivo del Condado en meses pasados, en donde se sugiere, entre otras cosas, que el condado disponga de fondos para anunciar en las publicaciones hispanas las diferentes oportunidades que tienen los negocios hispanos de negociar con el condado.
Estuvieron presentes en esta actividad Emilio Ruiz, de La Tribuna Hispana; Henry Salgado, de Crónica Press; Claudia Canales, de Nueva América; Marina Baquero, de The Christian Voice; Eduardo Cabezas, de Entérate Magazine; CabezasJohnny Velez, miembro de la junta directiva de (SCHAB); y el Pastor Marvin Lozano, Presidente de la Asociación de Pastores de Suffolk, Long Island; y William y Vicky Díaz, del periódico Noticia, entre otros. (Foto de Noticia)
Somos responsables de nuestra dignidad, pasada, presente y futura. Callarnos nos hace cómplices.
El cuarto poder, así se denomina a los medios (La Prensa escrita o digital).
A lo largo de la historia encontramos evidencia de ese poder, ya han demitido presidentes y políticos prominentes, últimamente han contribuido incluso a cambios de gobiernos en naciones.
Se rigen por normas y ética, mismas que demanda la profesión a efecto de proyectar transparencia, imparcialidad, credibilidad, confianza, honorabilidad y honestidad en su papel de juglar.
Tampoco hay que olvidarnos que todo medio también es un negocio y como tal tiene la obligación de satisfacer los intereses de sus inversionistas y/o propietarios.
Como cualquier otro ente natural también tienen derechos y obligaciones, como el de apoyar a quien le venga en gana dentro de cualquier contexto o áreas.
Los medios como cualquier otro negocio tienen una responsabilidad social y moral para con la comunidad en reciprocidad por el beneficio que recibe de ella y aun más si estos como estrategia de mercadeo también gritan a los cuatro vientos que son afines a su clamor, necesidades , convicciones y defensores como ente colectivo diciendo ser su voz.
Por ética no tiene el derecho de influir, manipular o coaccionar al lector a través de notas u fotos, pretendiendo imponer su propio criterio ya que con ello se atenta contra el derecho ajeno y se insulta de dignidad humana, además de perder credibilidad. Ser medio no significa omnipotencia, ni ser dueños de la verdad absoluta por escribir o divulgar una nota, más bien es el reto de asumir con humildad la responsabilidad de educar e informar la verdad concreta, no la aparente.
Estar inmersos en una coyuntura particular donde carecemos de una nación por el hecho de ser parte de toda una diáspora. Hasta qué punto el valido argumentar “El fin justifica los medios”. Si como parte de todo este conglomerado catalogado como minorías se requiere de la integración de todas las fuerzas que la conforman para hacer valer nuestros derechos como comunidad y de alguna manera salvaguardar nuestra dignidad para alcanzar otros derechos al interior de esta sociedad donde la mayoría sea la beneficiada.
De aquí la necesidad de adquirir conciencia social y apoyar la causa comunitaria que no es obligación de nadie, pero si es la responsabilidad de todos, si queremos forjar un mejor futuro para las presentes y futuras generaciones.
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